De los 2 a los 4 años de edad empezaremos a notar que nuestro hijo gana en autonomía y autoestima… o no… y hay que solucionar el problema. En algunos momentos veremos como se comporta de manera muy independiente y en otros veremos como pide nuestra atención constante.
¿Qué es la autoestima?
Es la conciencia que tiene una persona de su valor y su capacidad de aceptarse tal y como es.
La autoestima comienza a «generarse» en la infancia y se desarrolla gracias al entorno familiar. Una baja autoestima puede provocar sentimientos de inferioridad, angustia, ansiedad y provocaran que el niño sea más tímido, conductas agresivas y pueden conducirlo a muchos otros problemas.
Si conseguimos fomentar una buena autoestima, el niño se sentirá con la capacidad de realizar nuevas tareas, defenderá sus puntos de vista y conseguirá una buena relación con los demás.
Es muy importante en esta etapa que le proporcionemos la debida atención y que le apoyemos en todo lo necesario para que vaya moldeando su personalidad correctamente, gane autoestima y evitemos frustraciones.
Nuestro hijo se tiene que sentir orgulloso de si mismo y de lo que le rodea, y nosotros los padres, seremos los modelos en los que se fijara para ir construyendo poco a poco su personalidad. Lo más importante es que se sienta querido.
¿Qué tenemos que tener en cuenta a la hora de que nuestro hijo gane en autoestima y confianza en si mismo?
- Es fundamental mostrar una buena actitud hacia ellos y medir nuestras palabras.
- El niño tiene que valorar su aspecto, para ello, será interesante que se mire al espejo para que aprenda a valorarse y conocerse así mismo.
- El niño tiene que sentirse libre de aprender y de cometer errores. Mientras aprendemos es necesario que también cometamos errores.
- Tenemos que demostrar interés en las cosas que hacen nuestros hijos, tenemos que hacer que se sientan especiales.
- Es muy importante que le llamemos siempre por su nombre, una de las primeras cosas que aprenden a reconocer. Intentemos no usar diminutivos o apodos.
- Hay que fomentar la autonomía personal: lavarse los dientes, vestirse y desvestirse, comer, ordenar su habitación. Conseguiremos que el niño se sienta competente y capaz.
- Hay que estar al lado de nuestro hijo en todo este proceso.
- No hay que descalificarlos cuando comentan un error propio de su edad. Frases como «ya se te ha derramado la sopa, como siempre» no llevan a nada excepto a fomentar su inseguridad.
- Hay que ayudar al niño a valorarse correctamente y que se sienta satisfecho de si mismo.
- El niño tiene que empezar a hacer cosas por si mismo. Si se equivoca deberemos explicárselo y dejar que lo intente de nuevo.
- Hay que enseñar al niño como hacer las cosas más básicas como comer, vestirse etc… y ayudarle cuando nos lo pida.
- No hay que pronunciar palabras hirientes ya que pueden afectar profundamente a su psicología.
- Hay que enseñar al niño a ser optimista y hacerle ver que cuando vaya creciendo será capaz de hacer más cosas.
- Lo más importante es que se encuentre en un entorno de cariño, confianza y seguridad.
- Hay que enseñarle sin prisas y olvidarnos de lo competitiva que es esta sociedad.
¿Cómo podemos saber si nuestro tiene baja autoestima?
Un niño que tenga baja autoestima evitará las situaciones que más teme. Se frustra con facilidad, evita las tareas difíciles y es posible que no hable delante de sus compañeros o amigos.
Para intentar evitar la baja autoestima deberíamos hablar mucho con nuestro hijo e intentar conocerle, y hacerle ver que cometer errores es normal y que se puede aprender de ello.
¿Cómo podemos fomentar una buena autoestima en nuestro hijo?
- Tenemos que aceptar y valorar a nuestro hijo por lo que es y por las cosas que hace.
- Hay que respetar su individualidad
- Hay que corregir sus errores y sus defectos con comprensión, sin regañarle o dandole a todo un tono negativo.
- Hay que reforzar las conductas positivas con frases como “qué bien lo has hecho” y demostrandole afecto.
- Hay que ir dando nuevas responsabilidades a nuestro hijo en función de su edad y capacidad (cuarto ordenado, recoger la mesa…)
- Hay que poner límites claros a lo que puede y no puede hacer. No hay que cambiarlos constantemente.
Hay un libro muy interesante que trata el tema y que se titula: Autoimagen, autoestima y socialización: Guía práctica con niños de 0 a 6 años (Primeros Años)